Una justicia que demoró más de 36 años
Hoy es el aniversario de la masacre de la calle Juan B. Justo, donde el Ejército y la policía Federal y bonaerense mataron a tres adultos y dos niños. El único sobreviviente es querellante de una causa que el 27 comienza su etapa de alegatos.
Por Sonia Tessa
Hoy se cumplen 36 años de la masacre de la calle Juan B. Justo, en la que el Ejército, junto a la Policía Federal y de la provincia de Buenos Aires mató a Omar Amestoy, Ana María Fettolini, sus hijos de tres y cinco años, Fernando y María Eugenia, así como a Ana María Granada. Sólo se salvó Manuel Gonçalves Granada, que tenía cinco meses y fue arropado por su madre entre colchones, adentro de un placard. Hoy, Manuel es querellante en la causa que el próximo 27 ingresa en la última etapa del juicio oral y público. Desde ese día, las partes harán sus alegatos después de haberse escuchado toda la prueba. No es un aniversario más para el único sobreviviente, los familiares de los Amestoy y sus compañeros: en pocos días se conocerá la sentencia del juicio oral y público que se realiza en los Tribunales Federales de Rosario. Y hoy comienza en San Nicolás la semana de la Memoria, con actos que terminarán el 25 de noviembre.
La semana pasada, uno de los tres imputados, el ex militar Antonio Bossié, hizo su declaración indagatoria, y reflotó la teoría del "suicidio o pacto suicida" de la pareja asesinada (Omar y Ana María, a quien le decían Pochi) en una de las habitaciones de la casa, ubicada muy cerca del centro de San Nicolás. Claro que una pericia recibida en los últimos días por el Tribunal confirmó la firma del comisario general retirado Raúl Acosta, para certificar la veracidad de un documento en el que el Jefe de la Policía Federal de San Nicolás de entonces --Jorge Muñoz, otro de los acusados-- admite haber "abatido" a la pareja, a la que --fiel al lenguaje que las fuerzas de seguridad utilizaban en la época-- califica como "delincuentes subversivos".
El resultado de la pericia caligráfica que habían solicitado los fiscales Adriana Saccone y Juan Murray fue concluyente: los peritos oficiales, de la querella y también el de la defensa de Muñoz, coinciden en atribuir la firma de Acosta para certificar el parte preventivo en el que Muñoz se responsabiliza como autor material de la muerte de los dos militantes. Acosta había desconocido si esa era o no su firma en la audiencia del miércoles 3 de octubre pasado.
De este modo, se cerró la producción de la prueba y se dio paso a la indagatoria de Bossié, que primero desconoció al Tribunal que lo juzga, pero a la vez aceptó preguntas. El ex militar deslindó responsabilidades en la orden de tirar gases lacrimógenos en el baño de la casa, que causaron la muerte de los niños Fernando y María Eugenia Amestoy. También afirmó que el objetivo del operativo que irrumpió en la madrugada del 19 de noviembre de 1976 en la calle Juan B. Justo haya sido matar a los tres militantes. "Matar nunca", enfatizó. "La directiva era clara, no había que matarlos, sino ponerlos a disposición de la justicia", agregó. Sin embargo, admitió que Granada salió ensangrentada de otra habitación, y fue ultimada. El represor también se refirió a un procedimiento de la noche anterior --el del barrio Las Mellizas, que la policía intentó disfrazar como un enfrentamiento con montoneros pero en realidad fue un encontronazo entre efectivos de Buenos Aires y de la provincia de Santa Fe. Según Bossié, fue por documentos encontrados en esa primera casa que llegaron hasta la calle Juan B. Justo.
En la audiencia del 10 de septiembre pasado, la investigadora de la Comisión Provincial por la Memoria de Buenos Aires, Claudia Bellingieri, explicó que el Area 132 de Inteligencia siempre hacía un trabajo previo antes de asaltar una casa, y refirió además: "Estamos realizando una investigación en la provincia de Buenos Aires. Se han podido analizar 38 casas atacadas. El patrón es el horario, los ataques eran a muy tempranas horas de la madrugada o por las noches. No se procedía con ningún tipo de protocolo", señaló Bellingieri, quien identificó un denominador común en esos operativos: "una fuerza desproporcionada sobre viviendas ubicadas en zonas urbanas".
El martes 27 de noviembre comenzarán los alegatos de las partes, y una vez que terminen, los tres acusados tendrán derecho a decir sus últimas palabras. Una vez que ello ocurra, el Tribunal Oral integrado por Omar Digerónimo, Beatriz Caballero de Baravani y Jorge Venegas Echagüe dará a conocer el veredicto.
El aniversario de la masacre señala también el comienzo de la semana de la memoria. Esta tarde, a las 19, en el Centro Vasco de San Nicolás, comenzarán los actos de la Semana de la Memoria. Se inaugurarán una muestra plástica de ex alumnos detenidos desaparecidos de la Escuela Nacional de Bellas Artes Manuel Belgrano y también una exposición de fotografías de alumnos 4º año de la Escuela de Arte 501 de San Nicolás. "Es el octavo 19N que los convocamos en este Día de la Memoria para los Nicoleños", expresan desde la Asociación Civil por la Memoria. "La luz de los 30 mil son las memorias de sus luchas y sus sueños que señalan el porvenir", dice el texto. El miércoles habrá, también a las 19, en el Centro Vasco, una función de Teatro por la Memoria; el jueves participarán en un acto en Cancillería nacional, en Capital Federal, en homenaje a quien fuera obispo de San Nicolás, Carlos Ponce de León, asesinado en un accidente fraguado el 11 de julio de 1977. En el mismo acto se recordará a los sacerdotes palotinos masacrados en la iglesia San Patricio en julio de 1976 y al obispo Angelelli.
Las actividades volverán a San Nicolás el viernes, con la proyección del documental "Francisco Boix, un fotógrafo en el infierno", también a las 19, en el Centro Vasco, en la que estará el sobreviviente de la ESMA Víctor Basterra. El sábado, en el CIC, habrá una jornada con escuelas que participaron de las jornadas de Jóvenes y Memoria, en Chapadmalal y un recital. El domingo, a las 19, de nuevo en el Centro Vasco, se realizará un homenaje a Celia López Alonso.
En verdad, los actos comenzaron ayer, en Nogoyá, con el festival en homenaje a las víctimas de la masacre, que se realizó en la plaza Libertad de esa localidad. Amestoy y Fettolini eran de Nogoyá, un pueblo que desafió a la dictadura militar en noviembre de 1976, cuando llegaron los restos de la familia, y salió a la calle a despedirlos.
Hoy es el aniversario de la masacre de la calle Juan B. Justo, donde el Ejército y la policía Federal y bonaerense mataron a tres adultos y dos niños. El único sobreviviente es querellante de una causa que el 27 comienza su etapa de alegatos.
Por Sonia Tessa
Hoy se cumplen 36 años de la masacre de la calle Juan B. Justo, en la que el Ejército, junto a la Policía Federal y de la provincia de Buenos Aires mató a Omar Amestoy, Ana María Fettolini, sus hijos de tres y cinco años, Fernando y María Eugenia, así como a Ana María Granada. Sólo se salvó Manuel Gonçalves Granada, que tenía cinco meses y fue arropado por su madre entre colchones, adentro de un placard. Hoy, Manuel es querellante en la causa que el próximo 27 ingresa en la última etapa del juicio oral y público. Desde ese día, las partes harán sus alegatos después de haberse escuchado toda la prueba. No es un aniversario más para el único sobreviviente, los familiares de los Amestoy y sus compañeros: en pocos días se conocerá la sentencia del juicio oral y público que se realiza en los Tribunales Federales de Rosario. Y hoy comienza en San Nicolás la semana de la Memoria, con actos que terminarán el 25 de noviembre.
La semana pasada, uno de los tres imputados, el ex militar Antonio Bossié, hizo su declaración indagatoria, y reflotó la teoría del "suicidio o pacto suicida" de la pareja asesinada (Omar y Ana María, a quien le decían Pochi) en una de las habitaciones de la casa, ubicada muy cerca del centro de San Nicolás. Claro que una pericia recibida en los últimos días por el Tribunal confirmó la firma del comisario general retirado Raúl Acosta, para certificar la veracidad de un documento en el que el Jefe de la Policía Federal de San Nicolás de entonces --Jorge Muñoz, otro de los acusados-- admite haber "abatido" a la pareja, a la que --fiel al lenguaje que las fuerzas de seguridad utilizaban en la época-- califica como "delincuentes subversivos".
El resultado de la pericia caligráfica que habían solicitado los fiscales Adriana Saccone y Juan Murray fue concluyente: los peritos oficiales, de la querella y también el de la defensa de Muñoz, coinciden en atribuir la firma de Acosta para certificar el parte preventivo en el que Muñoz se responsabiliza como autor material de la muerte de los dos militantes. Acosta había desconocido si esa era o no su firma en la audiencia del miércoles 3 de octubre pasado.
De este modo, se cerró la producción de la prueba y se dio paso a la indagatoria de Bossié, que primero desconoció al Tribunal que lo juzga, pero a la vez aceptó preguntas. El ex militar deslindó responsabilidades en la orden de tirar gases lacrimógenos en el baño de la casa, que causaron la muerte de los niños Fernando y María Eugenia Amestoy. También afirmó que el objetivo del operativo que irrumpió en la madrugada del 19 de noviembre de 1976 en la calle Juan B. Justo haya sido matar a los tres militantes. "Matar nunca", enfatizó. "La directiva era clara, no había que matarlos, sino ponerlos a disposición de la justicia", agregó. Sin embargo, admitió que Granada salió ensangrentada de otra habitación, y fue ultimada. El represor también se refirió a un procedimiento de la noche anterior --el del barrio Las Mellizas, que la policía intentó disfrazar como un enfrentamiento con montoneros pero en realidad fue un encontronazo entre efectivos de Buenos Aires y de la provincia de Santa Fe. Según Bossié, fue por documentos encontrados en esa primera casa que llegaron hasta la calle Juan B. Justo.
En la audiencia del 10 de septiembre pasado, la investigadora de la Comisión Provincial por la Memoria de Buenos Aires, Claudia Bellingieri, explicó que el Area 132 de Inteligencia siempre hacía un trabajo previo antes de asaltar una casa, y refirió además: "Estamos realizando una investigación en la provincia de Buenos Aires. Se han podido analizar 38 casas atacadas. El patrón es el horario, los ataques eran a muy tempranas horas de la madrugada o por las noches. No se procedía con ningún tipo de protocolo", señaló Bellingieri, quien identificó un denominador común en esos operativos: "una fuerza desproporcionada sobre viviendas ubicadas en zonas urbanas".
El martes 27 de noviembre comenzarán los alegatos de las partes, y una vez que terminen, los tres acusados tendrán derecho a decir sus últimas palabras. Una vez que ello ocurra, el Tribunal Oral integrado por Omar Digerónimo, Beatriz Caballero de Baravani y Jorge Venegas Echagüe dará a conocer el veredicto.
El aniversario de la masacre señala también el comienzo de la semana de la memoria. Esta tarde, a las 19, en el Centro Vasco de San Nicolás, comenzarán los actos de la Semana de la Memoria. Se inaugurarán una muestra plástica de ex alumnos detenidos desaparecidos de la Escuela Nacional de Bellas Artes Manuel Belgrano y también una exposición de fotografías de alumnos 4º año de la Escuela de Arte 501 de San Nicolás. "Es el octavo 19N que los convocamos en este Día de la Memoria para los Nicoleños", expresan desde la Asociación Civil por la Memoria. "La luz de los 30 mil son las memorias de sus luchas y sus sueños que señalan el porvenir", dice el texto. El miércoles habrá, también a las 19, en el Centro Vasco, una función de Teatro por la Memoria; el jueves participarán en un acto en Cancillería nacional, en Capital Federal, en homenaje a quien fuera obispo de San Nicolás, Carlos Ponce de León, asesinado en un accidente fraguado el 11 de julio de 1977. En el mismo acto se recordará a los sacerdotes palotinos masacrados en la iglesia San Patricio en julio de 1976 y al obispo Angelelli.
Las actividades volverán a San Nicolás el viernes, con la proyección del documental "Francisco Boix, un fotógrafo en el infierno", también a las 19, en el Centro Vasco, en la que estará el sobreviviente de la ESMA Víctor Basterra. El sábado, en el CIC, habrá una jornada con escuelas que participaron de las jornadas de Jóvenes y Memoria, en Chapadmalal y un recital. El domingo, a las 19, de nuevo en el Centro Vasco, se realizará un homenaje a Celia López Alonso.
En verdad, los actos comenzaron ayer, en Nogoyá, con el festival en homenaje a las víctimas de la masacre, que se realizó en la plaza Libertad de esa localidad. Amestoy y Fettolini eran de Nogoyá, un pueblo que desafió a la dictadura militar en noviembre de 1976, cuando llegaron los restos de la familia, y salió a la calle a despedirlos.
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